La incertidumbre en tiempos de pandemia
En este tiempo donde el coronavirus y los cambios políticos se suceden sin parar, muchas personas podemos vernos con distintos síntomas que pueden afectar a nuestra salud psíquica y emocional.
La incertidumbre es el sentimiento que más he visto en consulta. No saber crea malestar y desasosiego. Pérdida de control. Miedo.
La vida nos está reclamando volver al presente, sin perder de vista el futuro más inmediato.
Todo lo que podamos hacer ahora y que esté en nuestra mano nos puede ayudar a disipar la sensación de descontrol: adoptar medidas de higiene, cuidar la distancia que mantenemos con los demás, ser prudentes a la hora de compartir espacio con otras personas...
Además de ser conscientes de en qué situación nos encontramos: si tenemos que cerrar nuestro negocio o no, si tenemos que reducir la plantilla, si nuestro puesto de trabajo está en peligro o no, si un ser querido se ha contagiado, si necesitamos nosotros hacer cuarentena, si nuestras relaciones se están viendo mermadas por esta situación global...
Es importante que no "tapemos" la realidad, sino que en toda su crudeza podamos verla tal y como es. Sin adornos. Con lo que hay, nos guste o no. Esto nos ayudará a tomar la responsabilidad de lo que nos está pasando ahora. Y por ende, recuperaremos el timón de nuestra vida.
Esto quiere decir que podremos adoptar las medidas adecuadas a nuestra situación en lugar de bloquearnos, quejarnos o paralizarnos: buscaremos soluciones a nuestras relaciones, comenzaremos un proceso de terapia si necesitamos ayuda externa, reduciremos la plantilla si es lo que toca ahora, cuidaremos mejor nuestra salud...
También, la vida nos está enseñando que hay cosas que no dependen de nosotros. Lo único que podemos hacer es poner de nuestra parte y ya no sólo en esta situación global, sino en cualquiera: en las relaciones personales, en la salud, en la enfermedad, en el trabajo... Y permitir que la vida haga el resto.
Creer que podemos controlarlo todo o que todo depende de nosotros, nos hace caminar con una carga que no es necesaria.
Resumiendo, en estos momentos de incertidumbre podemos...
1. Centrarnos en el presente sin perder de vista el futuro más inmediato.
2. Sólo hacer lo que está en nuestra mano.
3. Tomar conciencia de nuestra situación actual.
4. No tapar nuestra realidad de ahora, nos guste o no.
5. Tomar las medidas adecuadas con respecto a nuestra situación. Formar parte de la solución.
6. Permitir que las cosas que no están en nuestra mano se encargue la vida. Reduciremos nuestro sufrimiento.
Espero que estas sugerencias te ayuden a vivir en más armonía aquí y ahora.
Sandra Gamero